miércoles, 24 de diciembre de 2014

Al borde del Carnaval




"Esa Colombina puso en sus ojeras
humo de la hoguera de su corazón...
Aquella marquesa de la risa loca
se pintó la boca por besar a un clown.
Cruza del palco hasta el coche
la serpentina nerviosa y fina;
como un pintoresco broche
sobre la noche del Carnaval.

Decime quién sos vos,
decime dónde vas, alegre mascarita
que me gritas al pasar:
"-¿Qué hacés? ¿Me conocés?
Adiós... Adiós... Adiós...
¡Yo soy la misteriosa
mujercita que buscás!"
-¡Sacate el antifaz!
¡Te quiero conocer!
Tus ojos, por el corso, van buscando mi ansiedad.
¡Tu risa me hace mal! mostrate como sos.
¡Detrás de tus desvíos todo el año es Carnaval!

Con sonora burla truena la corneta
de una pizpireta dama de organdí.
Y entre grito y risa, linda maragata,
jura que la mata la pasión por mí.
Bajo los chuscos carteles
pasan los fieles del dios jocundo
y le va prendiendo al mundo
sus cascabeles el Carnaval."

 

Francisco García Jiménez

Viejo farolito del barrio



" Yo soy del barrio de Tres Esquinas,
viejo baluarte de un arrabal
donde florecen como glicinas
las lindas pibas de delantal.
Donde en la noche tibia y serena
su antiguo aroma vuelca el malvón
y bajo el cielo de luna llena
duermen las chatas del corralón.

Soy de ese barrio de humilde rango,
yo soy el tango sentimental.
Soy de ese barrio que toma mate
bajo la sombra que da el parrral.
En sus ochavas compadrié de mozo,
tiré la daga por un loco amor,
quemé en los ojos de una maleva
la ardiente ceba de mi pasión.

Nada hay más lindo ni más compadre
que mi suburbio murmurador,
con los chimentos de las comadres
y los piropos del Picaflor.
Vieja barriada que fue estandarte
de mis arrojos de juventud...
Yo soy del barrio que vive aparte
en este siglo de Neo-Lux."


 

Enrique Cadícamo